¿Cómo influye el verano en la diabetes?
16 agosto 2022

¿Cómo influye el verano en la diabetes?

¿Cómo influye el verano en la diabetes? ¿Cómo actuar frente a una ola de calor? Recomendaciones en verano para la diabetes.

Fuente: El Tiempo


La diabetes es un problema grave que afecta a millones de personas en todo el mundo, pero el verano puede poner en riesgo la salud si no nos cuidamos.

Llevando una vida sana y equilibrada, además de tomar los medicamentos adecuados y seguir las recomendaciones de los profesionales de la salud, controlar la glucemia (azúcar) en sangre puede ser relativamente sencillo.

Sin embargo, cuando llega el verano y la temperatura es alta, aumenta el riesgo de desarrollar otras complicaciones, por lo que es necesario prestar atención a una serie de recomendaciones.

¿Qué es la diabetes?

Por diabetes mellitus (DM) entendemos aquella alteración metabólica caracterizada por la presencia de hiperglucemia crónica.

Se acompaña, en mayor o menor medida, de modificaciones en el metabolismo de los hidratos de carbono, de las proteínas y de los lípidos.

El origen y la etiología de la DM pueden ser muy diversos, pero conllevan inexorablemente la existencia de alteraciones en la secreción de insulina.

A rasgos generales, tenemos dos tipos de diabetes, la tipo 1 y la tipo 2.

La DM tipo 1 que denominamos diabetes mellitus insulinodependiente o juvenil, en el que se precisa administración de insulina para controlar la glucemia en sangre.

También está la DM tipo 2, la diabetes mellitus no insulinodependiente o del adulto que no precisa de tratamiento de insulina, pero sí medicación oral y control de peso, alimentación y ejercicio.

¿Cómo afecta el calor a la diabetes?

En verano, el calor provoca que nuestro cuerpo tenga más probabilidades de sufrir una deshidratación.

La deshidratación es una condición en la que el cuerpo pierde una gran cantidad de líquido. Ocurre cuando pierde más líquido del que ingiere y el cuerpo no tiene suficiente líquido para funcionar correctamente.

Si hablamos de las personas que conviven con la diabetes, la deshidratación puede provocar un aumento de la concentración de glucosa en sangre llamada hiperglucemia.

¿Qué síntomas hay cuando la diabetes está alta?

La hiperglucemia puede presentar signos y síntomas de aumento de la sed, visión borrosa, fatiga, dolor de cabeza y en casos más graves, desorientación, náuseas, vómitos, etc.

El golpe de calor y la diabetes

Algunas complicaciones de la diabetes, como el daño a los vasos sanguíneos y los nervios, pueden afectar las glándulas sudoríparas, impidiendo que el cuerpo se enfríe de manera efectiva. Esto puede causar un golpe de calor.

Los síntomas de insolación o golpe de calor serían:

  • Piel caliente y enrojecida.
  • Respiración y pulso acelerado y fuerte.
  • Fiebre mayor a 40 grados.
  • Puede no existir sudoración.
  • Puede incluir convulsiones, alucinaciones, irritabilidad o cambios en el comportamiento e incluso desmayos.

Es importante llamar inmediatamente al 112 y mantener a la persona en un lugar fresco.

Ayudar a bajar la temperatura con paños fríos o dándole un baño de agua fría.

No le des nada de beber y control de los niveles de glucemia en sangre.

Cuando hablamos de personas con diabetes, no podemos olvidar que la dieta, ejercicio y el tratamiento influyen directamente en los niveles de glucemia en sangre.

Los cambios de hábitos debido al periodo vacacional del verano influyen en el control por lo que se debe estar más atentos a los signos de alarma.

Indicaciones frente al calor


Cómo actuar frente a un golpe de calor. Fuente: Ministerio de Sanidad. 2022

Consejos controlar la diabetes en verano

Beber agua incluso cuando no tenga sed para no deshidratarse, se aconseja 2 litros diarios.

Evitar el alcohol y las bebidas con cafeína, como el café, las bebidas deportivas o energéticas, que pueden causar deshidratación y elevar el nivel de azúcar en la sangre. 

Controlar el nivel de azúcar en la sangre antes, durante y después de la actividad. Es posible que deba cambiar la cantidad de insulina que usa. Es importante consultar con un profesional de la salud.

– Utilizar ropa holgada y de colores claros. La protección solar es fundamental para proteger la piel de posibles lesiones como el cáncer de piel.

– Las quemaduras solares pueden elevar el nivel de azúcar en la sangre. No camine descalzo, ni siquiera en la playa o la piscina.

– Utilice aire acondicionado siempre que fuera posible para mantenerse fresco ante las altas temperaturas.

Cuando hace demasiado calor, el ventilador de la habitación no será suficiente para refrescarnos.

¿Cómo afecta el verano a las insulinas?

Si se tiene como tratamiento la administración de insulina, también debemos tener precaución frente a las altas temperaturas.

Adrian, o más conocido como «Don sacarino» en las redes sociales, es un enfermero experto en diabetes porque además, convive con ella.

Las recomendaciones que realiza desde su blog y que debemos seguir en el de la insulina sería:

– La insulina que no se utiliza debe conservarse en la nevera entre los 2 y 8ºC.

– Se puede conservar a temperatura ambiente el bolígrafo o vial que vamos a utilizar siempre que no supere los 30 ºC.

– Si se utiliza bomba de insulina, la teoría indica que hay que hacer un cambio de equipo e insulina si entran en contracto frecuente con temperaturas mayores a 35ºC.

-Toda insulina que esté en contacto directamente con temperaturas menores a 2ºC, o mayores de 30ºC deben ser desechadas principalmente por la disminución en la eficacia de las mismas.

Estudios/Fuentes:

  • Conget, I. (2002). Diagnóstico, clasificación y patogenia de la diabetes mellitus. Revista española de cardiología, 55(5), 528-535.
  • Cómo manejar la diabetes cuando hace calor. Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. 
  • Temperaturas extremas. Ministerio de Sanidad.